is  time to let it go...

Hace demasiado tiempo que no escribo, podría decir que  hace demasiado tiempo que las palabras no fluyen de mi interior, demasiados pensamientos y sensaciones encontradas deseando salir pero por algún motivo no pasa.

Resulta que me he dado cuenta que estando más “expuesta”, más sensible me suelen fluir las palabras y suele ser mejor escritora o bueno eso dicen mis amigos.

Nunca les ha pasado que: ¿Que sueñan, piensan, pero ya no esperan a alguien?    

Ahora entiendo cuando Steve Maraboli  decía: “Dejar ir significa entender que algunas personas son parte de tu historia, pero no parte de tu destino”, y cuando entendemos estas palabras es cuando nos damos cuenta que aunque exista amor, cariño, pasión y porque no costumbre, debemos ser fieles a nosotros mismos.

Estar con una persona en muchas ocasiones generara un torbellino de emociones, pero debemos ser conscientes de que es lo que queremos, amar no significa aguantar, aguantar no nos hará más fuertes  ni nos hará el héroe o heroína de la relación.

Una relación es de dos personas y para mi concepto muy personal es: dos personas que trabajan juntas para lograr un propósito no importa que tan iguales o diferentes sean cada uno, dos personas que tratan de buscar un equilibro, dos personas que miraran más allá de los defectos que tengamos y que no importa cuanta rabia se llegue a tener, se buscara y abrirán un cuarto del olvido, pero no uno donde echemos al vacío todo, porque de las diferencias se aprenden, si no uno donde se pueda ser totalmente sincero con esa persona y hablar sin alzar la voz .

Cuando notamos que este equilibrio no se da hay que ser fieles a uno mismo y buscar la decisión más sabia y correcta para los dos, recordemos que el amor también es soltar y desear lo mejor. Que el amor no mide tiempo ni distancia cuando es verdadero, pero que no podemos renunciar a nuestra misión de vida. SER FELIZ, y para ello no podemos dejar nuestros sueños.

Recuerden, antes de esa persona teníamos un plan de vida, y ése es aquel que debemos de continuar.

Dolerá y es obvio, porque no importa que tanto se vivió o estuvo con esa persona siempre habrán recuerdos, pero a veces tienes que dejar las cosas ir. A veces tienes que dejar de preocuparte por un minuto.   

Así que no importa quien tome la decisión, no importa quién lo pensó primero, nada de esto importa, lo único verdaderamente importante es ser feliz y tener paz.